Una de las constantes que se pueden observar en la mayoría de los colegios de nivel básico en América Latina, es el miedo de perder alumnos por no contar con tecnología visible que permita al alumnado adentrarse al mundo digital. Los padres lo exigen y cada día están más conscientes de que su labor cotidiana profesional dentro de cualquier empresa requiere habilidades digitales importantes.

La mayoría de los colegios muestra un desfase digital con respecto al mundo laboral, tanto en su organización y comunicación interna como en servicio al cliente y, en lo más importante: enseñanza y estrategias para la utilización de las TICs.

Sin duda no ha sido por falta de trabajo o visión. Tanto la dirección como el equipo docente están comprometidos con su labor educativa, -después de todo, nadie estudia educación para enriquecerse-, los profesores son personas con vocación y en la gran mayoría de los casos, los colegios no pierden el enfoque de servir con amor a los niños.

Si bien, los expertos en tecnología han contribuido con herramientas interesantes, ninguna ha dado respuesta absoluta y mucho menos una herramienta a largo plazo que permita tanto al estudiante como al docente a un proceso significativo de enseñanza aprendizaje.

Hoy sabemos que la tecnología es una herramienta que hay que conocer y saber usar, donde lo importante no son tanto el hardware y los programas, sino, como lo argumentó el artículo anterior el Dr. Eduardo López. Es: transformar la información en conocimiento. (https://www.elblogdeeducacion.org/single-post/2017/03/05/Educar-para-formar-aprendices-permanentes)

Uno de los problemas ha sido la confusión entre la tecnología y la información. Las herramientas tecnológicas responden a la necesidad para acceder y generar información. Al mismo tiempo la información se hizo digital para que todos pudiéramos acceder a ella desde cualquier lugar y poder colaborar. Por lo tanto, la educación debe buscar una propuesta actual que vincule estas dos realidades.

El alumno ya desarrolla las habilidades digitales fuera del colegio. De hecho, uno de los retos más interesantes es, precisamente, ese: por la forma de vida actual, el alumno tiene una vida digital activa, interactuando desde todas las posibilidades a su alcance. Ya no es importante que conozcan la teoría digital, lo importante es incorporarla a la vida real, y esa vida real fuera del colegio está chocando con la vida en el aula.

Incluso lo importante en el aula ya no es la transmisión de información, esa está en la nubes o servidores, es pública por primera vez en la historia. Lo importante es el pensamiento ejecutivo para hacer algo valioso con esa información, que genere oportunidades para todos.

5 Estrategias para ligar el mundo digital y de la información en nuestras instituciones educativas:

1. Hacer que toda la comunicación interna se genere por medios digitales. (Minutas de Juntas, instrucciones organizacionales, planeaciones, etc.)

2. Generar toda la comunicación con padres y alumnos por medios digitales.

(Circulares, calificaciones, avisos, etc.)

3. La escuela debe contar con Facebook oficial, donde los directivos puedan informar sobre las actividades y compartir su filosofía, esto con una constancia mínima de una a dos publicaciones diarias.

4. Que los profesores desde el aula generen contenidos digitales como blogs, canales de YouTube por salón o grado, evaluaciones por plataformas digitales, etc.

5. Servicio al cliente y posibles clientes por medio de CRM. Customer Relationship Management. (Los colegios pierden muchas oportunidades por falta de información y seguimiento de candidatos y segmentación.)

La información nos lleva tomar buenas decisiones, a generar oportunidades. La tecnología nos da la posibilidad de acceder a ella.

Si enseñamos a los estudiantes de hoy como enseñamos ayer, les estamos robando el mañana. John Dewey.

#Laeradigitalolaeradelainformación